La Teoría De
Contingencia
Desde sus inicios las teorías
organizacionales se fundamentaron en sistemas cerrados, los cuales definían su
eficacia dependiendo de la organización interna.
Desde el modelo clásico
racional hasta el modelo de relaciones humanas, los teóricos abordaron diversos
enfoques para el estudio de la efectividad de la estructura y el recurso humano
de las organizaciones, estas teorías fueron perdiendo vigencia debido a su
rigidez, mecanicismo, humanismo exagerado,
y pocas relaciones con el entorno.
A partir de las teorías
estructuralistas se da inicio a la organización vista como un sistema abierto
que interactúa con su medio ambiente. De hecho,
ya la teoría de sistemas propone que
la apertura de una organización produce que ésta esté en constante intercambio
de energía con su entorno; su naturaleza es
orgánica, por lo que poseen una estructura jerárquica flexible que les permite
adaptarse con facilidad a los cambios que provienen de los agentes externos.
Sin embargo, la generalidad de esta teoría conduce a la aparición de modelos
más prácticos como la teoría situacional.
La palabra contingencia es definida
por (Bueno Campos, 1996, p.168) como "toda variable externa,
característica ambiental, factor circundante o fuerza influyente
que afecta el diseño efectivo de
la organización y a su comportamiento de forma,
en principio no controlable directamente", por medio de una relación si
(causa)… entonces (efecto). No Obstante (Morera Cruz, 2006, p. 8) dice que es
"algo incierto y eventual que puede suceder o no, suele representar una
proposición cuya verdad o falsedad puede conocerse por la experiencia o por la
evidencia y no por la razón". Es por esto que los teóricos de este enfoque
afirman que los modelos organizacionales adecuados surgen al conocerse las características
del entorno externo de la empresa, y no a
partir de consideraciones teóricas previas.
La
Contingencia.
La palabra contingencia
significa algo incierto o eventual, que puede suceder o no. Se refiere a una proposición cuya verdad o falsedad
solamente puede conocerse por la experiencia o por la evidencia y no por la
razón. En un aspecto más amplio, el enfoque de la contingencia destaca que no
se alcanza la eficacia organizacional siguiendo un único y exclusivo modelo
organizacional, es decir, no existe una única forma que sea mejor para
organizarse con el fin de alcanzar los objetivos diferentes de las organizaciones
dentro de un ambiente también cambiante.
Los estudios actuales sobre las
organizaciones complejas llevaron a una nueva perspectiva teórica: la
estructura de una organización y su funcionamiento son dependientes de la
interface con el ambiente externo. La más notable contribución de los autores
del enfoque de la contingencia está en la identificación de las variables que
producen mayor impacto sobre la organización, como el ambiente y la tecnología,
para entonces predecir las diferencias en la estructura y en el funcionamiento
de las organizaciones debidas a las diferencias en estas variables. Así,
diferentes ambientes requieren diferentes relaciones organizaciones para una
eficacia óptima. Se hace necesario un modelo apropiado para cada situación
dada.
Orígenes de la teoría situacional o de contingencia.
La teoría situacional o de
contingencia nació a partir de los años cincuenta de una series de investigaciones llevadas a cabo
para verificar cuales son los modelos de estructuras organizacionales más
eficaces en determinados tipos de empresas. Los investigadores, de manera
aislada, buscaron confirmar si las organizaciones eficaces de determinados tipo
de empresa seguían los supuestos de la teoría clásica, como la división del
trabajo, la amplitud del control, entre otros. Los resultados,
sorprendentemente, condujeron a una nueva concepción de organización: la
estructura de una organización y su funcionamiento dependen de la interfaz del
ambiente externo en otros términos, no existe una manera única y mejor de
organizar. Entre los principales representantes de la teoría situacional
tenemos: William Dill; Willian Starbuck, Janes de Thompson, Paul Lawrence, Jay
Lorsch, Tom Burns.
Esta
teoría, surge de investigaciones empíricas
aisladas, realizadas con el objetivo de
verificar los modelos de estructuras
organizacionales más eficaces, derivando con ello una nueva concepción de empresa, que se
adecue comenta (Guizar, 1999) a los cambios que presenta el medio ambiente, por
medio de la identificación de las variables que
producen mayor impacto, donde su estructura y funcionamiento dependen de la
adaptación e interrelación con el entorno externo; explicando que existe una
relación funcional entre las condiciones ambientales y las técnicas administrativas
apropiadas para el alcance de los objetivos,
manifestando que no existe una teoría única para la solución de los problemas
organizacionales, rompiendo según (Soldevilla, 1972), (…) "con los esquemas conceptuales de la
administración" (…)
tradicional.
Según
(Bueno Campos, 1996) existen dos corrientes de la Teoría Contingencial: el de
"la Escuela de los
Sistemas Socio- técnicos y el de la corriente Contingencial", el primero
hace énfasis en los estudios de Emery y Trist quienes en Londres en los años
sesenta, tratan de identificar el proceso y las
reacciones que ocurren en el ambiente, clasificándolo según su naturaleza
,afirmando que existen cuatro tipos de contextos ambientales que regulan la
estructura y comportamiento organizacional, estos son: "El entorno
Estático y Aleatorio (Tranquilo), Entorno Estático y Segmentado, Entorno
Perturbado y Reactivo y el Entorno de Campos Turbulentos" (Chiavenato,
2000), determinado con ello la interdependencia causal entre las compañías
estudiadas y su entorno.
La
Segunda Corriente estudia la influencia de las contingencias sobre la
estructura organizativa y el comportamiento administrativo, comienzan sus
estudios a finales de los cincuenta con las investigaciones de la socióloga
Joand Woodward, quien analizo 100 firmas industriales, catalogando tres formas
de producción:
"Producción o factura unitaria,
Producción en masa o mecanizada, Producción Continua o Automatizada"
(Kan,2003) deduciendo que la variable tecnología (técnicas
de producción) adoptada determina las estructuras y los comportamientos
empresariales. Posterior a ello, también a finales de los cincuenta Burns y
Stalker estudiaron alrededor de 20 firmas de la industria electrónica en Escocia
e Inglaterra, con el
objetivo de verificar la interrelación entre la administración y el
entorno externo, clasificando a las organizaciones como mecanicistas y
orgánicas, concluyendo que el ambiente determina la estructura y que este
afecta su sistema administrativo y funcionamiento.
Seguidamente
en los años sesenta Chandler según la experiencia de algunas organizaciones
Estadounidense (DuPont, General Motors, Standard Oil y Sear Roebuck & Co),
examina como esas empresas adaptan su
estructura a las estrategias de negocios,
deduciendo, que las organizaciones norteamericanas estuvieron determinadas por
las estrategias de mercado en estos
últimos 100 años, explicándolo por medio de un proceso histórico. Se le suma a
lo anterior, Thompson en el año sesenta y siete que relaciona a la organización
con el medio ambiente dentro de una lógica de sistema
abierto y racionalidad organizacional.
Posterior
a él, Lawrence y Lorsch ya en los setenta, investiga diez firmas de tres
sectores industriales: plásticos, alimentos y
conteiner, afirmando que los principales problemas organizacionales son la
diferenciación (división en subsistemas) y la integración
(unificación y coordinación de
esfuerzos), infiriendo con esto según (Kenyon, 1989) que la empresa que más se
adapte a las características del ambiente, estará más cerca del éxito.
Teoría de
contingencia o situacional
Según
Lawrence y Lorsch formularon la teoría situacional: “No existe una manera única
y mejor de organizar; por el contrario, las organizaciones necesitan ser
adecuada sistemáticamente a las condiciones ambientales”.
La
teoría situacional presenta los siguientes aspectos básicos:
·
La organización es de naturaleza sistémica; es un
sistema abierto.
·
Las variables
organizacionales presentan una compleja interrelación entre sí y con el
ambiente, lo cual explica la relación estrecha entre las variables externas
(como certeza y estabilidad del ambiente) y los estados internos de la
organización (diferenciación e integración organizacionales), así como el tipo
de solución utilizado en los conflictos interdepartamentales e interpersonales.
·
La estructura interna de la organizaciones representan
un conjunto de tres puntos de confrontación (interface):
-
Confrontación organización – ambiente.
-
Confrontación grupo – grupo.
-
Confrontación entre el individuo y la organización.
Aplicación
de la teoría situacional.
En
la aplicación de la teoría situacional
no solo se debe tomar en cuenta la confrontación entre la organización y el
ambiente, también se comprueba que la organización no puede dar un tratamiento
ideal a la tarea de los individuos; por el contrario, el mejor tratamiento
depende del trabajo que debe realizarse.
En
general la teoría situacional procura explicar que los principios de
organización no son absolutos. Los aspectos universales y normativos deben sustituirse
por el criterio de adecuación entre organización y ambiente, y por el criterio
de adaptación entre el trabajo, empresa y persona. Las organizaciones también
deben ajustarse sistemáticamente a las metas colectivas y a los objetivos
humanos individuales.
Características
de la teoría de contingencia o situacional.
A
diferencia del resto de teorías organizacionales, la contingencial centra su
foco de atención en el
ambiente externo de la empresa, dando prioridad a lo que ocurre fuera de la
organización antes de indagar en los elementos internos de la estructura
organizacional. Dicho enfoque busca un equilibrio entre ambos
contextos, donde la organización busca obtener el mayor beneficio de sus
circunstancias ambientales para garantizar su éxito como empresa.
Otro
de los principios
fundamentales que diferencia a la teoría contingencial de otros enfoques es su
tendencia a no establecer un tipo ideal de organización para todas las
circunstancias.
De lo
anterior se entiende que los aspectos externos a la organización actúan como
variables independientes sobre los modos de organización interna de la empresa,
los cuales son variables dependientes de las primeras. Esta relación, sin
embargo, no se establece como una de tipo causa-efecto, sino como una toma de
decisión de los líderes de la organización sobre la elección de la alternativa
más eficaz ante las circunstancias externas.
El enfoque de
contingencia abarca, que no hay una única forma óptima de organizar
y administrar que sea aplicable a todas las empresas, sino que todo depende de
las condiciones del ambiente donde éstas desarrollan sus actividades. De aquí
la importancia de que la gerencia determine los efectos que lo externo origina
e incide en la estructura de la empresa de tal forma que se prepare para
propiciar las acciones que deben ser tomadas en cuenta a favor de su
operatividad. La teoría de la contingencia es un
paso más allá de la teoría de los sistemas en administración. La visión
contingente de la organización y de su administración sugiere que una
organización es un sistema compuesto de subsistemas y delineado por límites
identificables en relación con su sistema ambiental.
La visión contingente busca
comprender las relaciones dentro y entre los subsistemas, como también entre la
organización y su ambiente, y definir estándares de relaciones o configuración
de variables. Ella enfatiza la naturaleza multivariada de las organizaciones y
busca comprender cómo las organizaciones operan bajo condiciones variables y en
circunstancias específicas. La visión contingente está dirigida por encima de
todo hacia la recomendación de diseños organizacionales y sistemas gerenciales
más apropiadas a situaciones específicas”.
Autor: Enma
Palacios
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